viernes, 31 de agosto de 2007

Hamlet (fragmento)


.:HAMLET :.
(fragmento)

Ser o no ser, esa es la cuestión:
si es más noble para el alma soportar
las flechas y pedradas de la áspera Fortuna
o armarse contra un mar de adversidades
y darles fin en el encuentro. Morir: dormir,
nada más. Y si durmiendo terminaran
las angustias y los mil ataques naturales
herencia de la carne, sería una conclusión
seriamente deseable. Morir, dormir:
dormir, tal vez soñar. Sí, ese es el estorbo;
pues qué podríamos soñar en nuestro sueño eterno
ya libres del agobio terrenal,
es una consideración que frena el juicio
y da tan larga vida a la desgracia. Pues, ¿quién
soportaría los azotes e injurias de este mundo,
el desmán del tirano, la afrenta del soberbio,
las penas del amor menospreciado,
la tardanza de la ley, la arrogancia del cargo,
los insultos que sufre la paciencia,
pudiendo cerrar cuentas uno mismo
con un simple puñal? ¿Quién lleva esas cargas,
gimiendo y sudando bajo el peso de esta vida,
si no es porque el temor al más allá,
la tierra inexplorada de cuyas fronteras
ningún viajero vuelve, detiene los sentidos
y nos hace soportar los males que tenemos
antes que huir hacia otros que ignoramos?
La conciencia nos vuelve unos cobardes,
el color natural de nuestro ánimo
se mustia con el pálido matiz del pensamiento,
y empresas de gran peso y entidad
por tal motivo se desvían de su curso
y ya no son acción.

William Shakespeare

jueves, 30 de agosto de 2007

Recomendacion # 3

Hello!...
Bueno acabo de terminarlo y me gustó!..
El libro es:

Los Fantasmas

y es de:

Fritz Leingber

lunes, 27 de agosto de 2007

La vida es Sueño



.:La vida es sueño:.
(fragmento)
Sueña el rico en su riqueza
que más cuidados le ofrece;
sueña el pobre que padece
su miseria y su pobreza;
sueña el que a medrar empieza,
sueña el que afana y pretende,
sueña el que agravia y ofende,
y en el mundo, en conclusión,
todos sueñan lo que son,
aunque ninguno lo entiende.
Yo sueño que estoy aquí
destas prisiones cargado,
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí,
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño:
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son...

sábado, 25 de agosto de 2007

Margarita DeBayle



.:A MARGARITA DEBAYLE :.


Margarita, está linda la mar,
y el viento
lleva esencia sutil de azahar;
yo siento
en el alma una alondra cantar;
tu acento.
Margarita, te voy a contarun cuento.
Este era un rey que tenía
un palacio de diamantes,
una tienda hecha del día
y un rebaño de elefantes.
Un kiosko de malaquita,
un gran manto de tisú,
y una gentil princesita,
tan bonita,Margarita,
tan bonita como tú.
Una tarde la princesa
vio una estrella aparecer;
la princesa era traviesa
y la quiso ir a coger.
La quería para hacerla
decorar un prendedor,
con un verso y una perla,
una pluma y una flor.
Las princesas primorosas
se parecen mucho a ti.
Cortan lirios, cortan rosas,
cortan astros. Son así.
Pues se fue la niña bella,
bajo el cielo y sobre el mar,
a cortar la blanca estrella
que la hacía suspirar.
Y siguió camino arriba,
por la luna y más allá;
mas lo malo es que ella iba
sin permiso del papá.
Cuando estuvo ya de vuelta
de los parques del Señor,
se miraba toda envuelta
en un dulce resplandor.
Y el rey dijo: "¿Qué te has hecho?
Te he buscado y no te hallé;
y ¿qué tienes en el pecho,
que encendido se te ve?"
La princesa no mentía,
y así, dijo la verdad:
"Fui a cortar la estrella mía
a la azul inmensidad.
"Y el rey clama: "¿No te he dicho
que el azul no hay que tocar?
¡Qué locura! ¡Qué capricho!
El Señor se va a enojar.
"Y dice ella: "No hubo intento:
yo me fui no sé por qué;
por las olas y en el viento
fui a la estrella y la corté."
Y el papá dice enojado:
"Un castigo has de tener:
vuelve al cielo, y lo robado
vas ahora a devolver."
La princesa se entristece
por su dulce flor de luz,
cuando entonces aparece
sonriendo el buen Jesús.
Y así dice: "En mis campiñas
esa rosa le ofrecí:
son mis flores de las niñas
que al soñar piensan en mí.
"Viste el rey ropas brillantes,
y luego hace desfilar
cuatrocientos elefantes
a la orilla de la mar.
La princesa está bella,
pues ya tiene el prendedor,
en que lucen, con la estrella,
verso, perla, pluma y flor.
Margarita, está linda la mar,
y el viento
lleva esencia sutil de azahar:
tu aliento
Ya que lejos de mí vas a estar
guarda, niña, un gentil pensamiento
al que un día te quiso contar
un cuento.
Rubén Darío
*Escuchando: Aozora Namida-hitomi
takahashi*

martes, 21 de agosto de 2007

Los deseos de tu corazón



.:Los deseos de tu corazón:.
(por Annabel Lee)

Dónde está la poesía
dónde esta el dolor
donde yo hallo
los deseos de tú corazón

Era una tardefría
era un ardiente temor
era la sombra tardía
y los deseos de tú corazón

Aclamaba la noche
aclamaba la pasión
aclamaba sin reproche
los deseos de tú corazón

Puedo pedir lo que sea
puedo pedir tu dolo
puedo pedir al olvido
los deseos de tú corazón

Dónde esta la luna
dónde está el temor
dónde está el recuerdo
y los deseos de tú corazón

El invierno llegaba
El invierno llegó
y en vamo buscaba
los deseos de tú corazón

Los busqué en la luna
las estrellas y el sol
pero nunca encontré
los deseos de tú corazón

Y hoy fría en un tumba
y hoy, meditabunda
lamento no haber hallado
lo tanto buscado

Que por tanto tiempo buscó
que por tanto escondió
que no halló al olvido y
los deseos de tú corazón

Daniela y El Muchacho del espejo II parte

Bueno, aquí la continuación de la primera parte...




.:Daniela y El Muchacho del espejo:.




Ahora, Celeste sabía de donde parecía conocerlo. Kaitt, era el nombre del osito de felpa que le había regalado Sebástian a Daniela por su cumpleaños del año anterior, y Sebastián era el novio de Daniela, que murió el día después del cumpleaños anterior de ésta. Ella había pensado que Daniela ya había superado eso, pero no lo podía creer… parecía que aún lo recordaba y se podía demostrar pues, ella estaba hablando con Kaitt, una copia de lo que era Sebástian, ¿y cómo era él? Pues no es tan fácil describirlo, Sebastián era el chico mas popular de la escuela, estaba rodeado de mil chicas que no lo dejaban tranquilo, pero él solo tenía ojos para Daniela, desde el primer momento en que la vio, parecía haberse enamorado profunda e intensamente de ella. Tenía el cabello negro y corto, unos ojos negros también, pero de un negro más oscuro, mas profundo, tenía una mirada peculiar, era de ese tipo de miradas que parecen rayos X, esas que te pueden ver hasta el mas oscuro secreto; era alto, delgado y se podía dibujar un contorno plateado alrededor de él, algunas personas decían que era su aura. Para mí tenía unos gustos extraños... No todos los niños de su edad se visten de negro con casacas de cuero a los años 70s, era algo inusual, pero a Daniela le gustaba así, ella le había confesado Sebastián que también le gustaba, pero no porque popular, le gustaba por su mirada, su manera de ser, la manera que la protegía y que siempre estaba allí, cuando mas lo necesitaba. El día de su muerte, Daniela lloró y sufrió mucho, fue la última en quedarse en el cementerio, hasta los familiares de Sebástian se fueron antes que ella… ¿tanto lo quiere?, se cuestionaba asimismo Celeste.

-Daniela, tengo que hablar contigo, y es urgente
-Que te parece mas tarde-le respondió de mala gana
-No tiene que ser ahora, si quieres el también puede escuchar, pus él también tiene que ver con lo que te voy a decir
-Por favor…
-Daniela, mírame-se acercó a ella- ¡¡tienes que despertar!!, tienes que darte cuenta, de que esto es el producto de tus sueños y tus deseos, nada de esto existe…¡¡Nada!! Hasta Kaitt, no existe!...estamos dentro de un mundo creado por ti, para escapar de tus problemas
-Puedes explicarte mejor Celeste-le dijo Daniela, pareciendo saber de lo que le estaba diciendo y tratando de recordar.
-Cuando me contaste del espejo, y no vi nada, no pensé que estabas loca, pensé que estabas un poco confundida y aturdida, y hasta podría decirse mal o dañada por la separación de tus padres, que pensé que estabas imaginando, pero me acordé que tu nunca mientes, ni haces bromas, ni aún en estado de chock lo haces, en lugar de eso, te empeoras y eres la “Señora de la Verdad”. En fin, averigüé sobre lo que me comentaste y descubrí algo terrible… Ese espejo que encontraste que tu “Kaitt” dejó apropósito para ti, en la puerta de tu casa, es un espejo maldecido en la edad media, según lo que he investigado, este espejo te muestra y te transporta a un mundo donde todos tus sueños se hacen realidad…
-Pero, ¿qué tiene de malo eso?-le preguntó Daniela
-Que hace que creas en ese mundo, que te cierra los ojos a la verdad, que no permite la vida normal a una chica joven como tú. Etc..etc..
-Daniela, tienes que darte cuenta, todo este mundo, incluyendo a Kaitt, ha sido creado por ti, por tus temores, por tus deseos y todo por algo de ti que haz ido dejando en este espejo, le vas restando y eso provoca que estés mal débil a cualquier enfermedad mortal o no.
-Te puedo creer por todo, porque en eso si soy conciente y yo ayudé para que siga creciendo este mundo…pero lo que no puedo creer es que también digas lo mismo de Kaitt, él si existe!
-Haber Daniela, si Kaitt te quiere y te conoce, pregúntale, ¿cuándo es tu cumpleaños?
Daniela hizo esto y al darse cuenta que no sabía la respuesta, se le cayó la venda de los ojos, casi llora, pero no quería hacerlo, no le gustaba mostrar su debilidad hacia los demás. “Llorar es signo de debilidad”, se había dicho siempre cuando estaba en problemas y la estaban regañando. Miró a Celeste a los ojos, como pidiéndole ayuda, ella le hizo señas para que regresaran a su casa, pero ya era demasiado tarde, Kaitt ya se había dado cuenta de aquello y había cambiado a su verdadera forma, que no tenía nada que ver con Kaitt, Sebastián o cualquier otro chico, mas tenía aspecto humano, auque todos sabíamos que no lo era.

Ellas corrieron, lo más rápido que pudieron, y llegaron a casa, mientras subían los escalones para llegar a la habitación de Daniela, Kaitt venia por atrás tratando de detenerlas o atraparlas o no sabían que quería hacerles, pero tampoco se iban a dejar atrapar para saberlo. Estaban a punto de cruzar el espejo, cuando Kaitt entró a la habitación…
Ellas estaban escondidas, él podía saberlo…las quería encontrar y no quería hacerles daño. Ahora se sentía confundido, no sabía que hacer, decirle la verdad borrando el pasado y arruinando los momentos futuros que podría pasar con ella... ¿la estaba queriendo? Nunca había sentido algo así…
Mientras caminaba hasta donde se encontraban, recordaba aquel momento cuando se conocieron, un inolvidable día…al menos para él.
Era de noche, una noche de luna llena, una hermosa luna llena. Él estaba paseando, le encantan las noches con lunas llenas y que mejor para disfrutarlo que con una caminata…allí estaba ella, sentada en una banca del parque recientemente inaugurado por ella. En ese momento no sabía quien era, solo sabía que era algo especial, pudo sentir así a lo lejos, algo extraño en sus ojos, “ella es diferente” se dijo en ese momento.
Ella estaba muy triste, lloraba, el se acercó como imán al metal, no podía parar algo que estaba dentro de su ser, aun así el no quisiera. En fin, allí estaba parado, frente a ella, tenía la forma de un pequeño gatito. Ahora, al estar mas cerca, el sabía que ella necesitaba algo, sabía que ella lo necesitaba, pues lo cargó y lo colocó en su regazo. “Eres tan lindo” le había dicho, mientras acariciaba su suave pelaje, y lo abrazaba
Ahora, ya no era un gatito, ahora era un lindo osito de felpa, pequeño y abrasable. “Yo te quería…mentira…., se corrigió, yo te quiero”, le había dicho. “Era tan bueno, tan lindo, tan tierno”, mientras él podía ver como una lágrima caía por su mejilla, sentía ganas de abrasarla, de contarle su historia, pero no podía, no podía mientras ella no quisiese.
Lo dejó al lado de la banca. “Me gustaría tanto”… había dicho, eso era todo, era la palabra clave. Al instante, el osito de peluche, era un niño de ojos profundos. No le dijo nada, solo se acercó lentamente, ella pareciera que no hubiera notado su presencia y la abrazó apasionadamente, haciéndola sentir según su criterio: segura--- Después el tiempo se encargó de todo.
Pero ahora, él estaba yendo a buscarla aún sin saber que hacer después. El sabía que ella lo necesitaba…y el también había aprendido a necesitarla…
-Sé donde están-gritó-no me hagan sacarlas a la fuerzas, además no quería hacerles daño
Daniela salió y jaló a Celeste con ella
-Muy bien, hablemos-le dijo Celeste de muy mala gana
Daniela se dio cuenta que eso estaba empezando a irritar a Celeste, y eso le atemorizaba, pues Cueste siempre reacciona mal a todo.
-Kaitt por favor, dime la verdad, por favor, si me quieres dime la verdad…
-Daniela-mirándola los ojos tierna y analíticamente- yo no tengo que decirte algo que siempre has sabido, tú te metiste en esto siendo conciente de todo lo que este conllevaba…
-Nada más le dirás –completamente irritada y molesta
-Daniela-continúo Kaitt, sin importarle lo dicho por Celeste- yo, antes de conocerte, era la nada en sí, no existía, no merezco ser llamado fantasma o sombra, ni mucho menos viento o brisa , pues estás cosas son lo que son, la sombra es sombra y el viento es viento, era la nada.... hasta que te conocí y en ese instante que te abracé pude sentirme por primera vez en mi larga existencia completamente lleno, no puedo explicar esto con palabras, aunque sé que tu también lo sentiste y sé que me correspondes…Contigo yo aprendí a querer, aprendí a recitar poemas, aprendí a soñar con ángeles, aprendí a volar por el cielo, aprendí… a conjugar el verbo amar…
-Yo…- susurró Daniela intentando contestar
-Ustedes son imposibles-interrumpió Celeste-Especialmente tú!-señalando a Kaitt-no lo puedo creer – gritó llegando al límite de lo que podía soportar…
Celeste no calmó su ira, sus ojos se volvieron en blanco, no parecía reaccionar…
Este fue, se puede decir, el momento crucial de la historia, Celeste estaba perturbada, casi histérica y comenzó a golpear todo a su paso, golpeó el armario, golpeó la pared y… golpeó el espejo…El cual cayó al suelo precipitando las cosas, de una manera rápida.
-Nooo- gritó Daniela llorando y desperada
Kaitt esta desapareciendo, poco a poco, se desvanecía, y no sabía que hacer para remediarlo
-¡No! ¡Kaitt! ¡Nooo!- gritó Daniela- ¡Celeste que hiciste! –le vociferó
Daniela se dirigió a Kaitt y la abrazó muy fuerte. Podía sentir que se estaba desvaneciendo
-Daniela –susurró Kaitt –Yo…
-No importa Kaitt-respondió Daniela- No me importa nada, solo tu, no quiero que te vayas, ¡No quiero que te vayas! ¡No me dejes sola!¡Todos me dejan sola!
Kaitt no sabía que hacer, ni que pensar…solo atinó a decir
-Yo te quiero, Daniela- le dijo y desapareció
-Yo también te quiero Kaitt- le respondió tardíamente.
Entonces, Daniela rompió en llanto…
-Daniela, si te consuela saber, sé de una forma para que él pueda volver
-No, no importa Celeste, ya aprendí la lección, no voy a volver a enamorarme de nadie. Odio el amor-sollozó
Celeste no le hizo caso, se acercó al lado más grade del espejo, provocó un corte en su mano derecha mientras dejaba fluir la sangre…
-Daniela, el espejo ya no será un problema para ti, ni para nadie-dijo Celeste en voz alta con la voz quebrada
Pidió un deseo con el fondo de su corazón… Ahora ya no podía detener nada, la hemorragia se incrementaba y…
De repente Daniela oyó un fuerte sonido a su lado, Celeste había caído, pálida, demasiado pálida, casi helada, muy fría, parecía… muerta.
-¿Ahora tú?-gritó Daniela desesperada, pérdida, caída, derrotada.
-No te preocupes, todo estará bien- le dijo Celeste tratando de darle un pequeño fulgor de esperanza-Mira, señalo atrás de ella
Celeste cerró los ojos, desapareció de este melancólico mundo y fue a dar a otro mucho mejor, llamado vida…
Daniela suspiró, no dio la vuelta, pues ya imaginaba que, o mejor dicho quién estaba atrás de ella, se quedó allí en el suelo, junto a Celeste, como muestra de su dolor, no habló, ¿qué tendría que decir?¿Tendría que hacerlo?. Empezó a llorar lentamente, a verter en sus lágrimas todos los momentos alegres que había pasado con su única mejor amiga, ¿ahora, que sería de ella?
“Estoy, sola nuevamente” se dijo así misma, mientras seguía llorando.
Él se acercó lentamente, sin hablar, sin suspirar, sin sentir, no sabía que estaba haciendo, solo seguía a sus instintos. Al llegar se colocó junto a ella, y la abrazó, la abrazó tan fuerte como la primera vez, la abrazó lentamente, la abrazó sin decir nada, demostrando que no es necesario hablar para amar.
-Fue una gran amiga, una verdadera amiga-le dijo a Daniela-no te preocupes, como ella decía
-Todo estará bien- respondió Daniela- y no, no era una gran amiga… -cayo un momento como para reflexionar lo que iba a decir – es una gran amiga-dijo. Gracias por todo-le dijo a Celeste.
Kaitt abrazó más fuerte a Daniela, y ella a él. Estuvieron allí un buen rato, no puedo precisar cuánto porque no lo sé realmente, ni menos puedo decir que pasó después pues, esa es otra historia…




PDT: Sorry por las faltas en la ortografía y en la puntuación

"También quería agradecer a las colaborados para que este cuento existiese..Agradezco a Melissa B, Melisa R, Jennifer A, Angela LP y Rossina P [xq sino me pegan =S]
*Escuchando: Gothic
Christmas*

Una sangrienta canción



.:Una sangrienta canción:.
(por Annabel_Lee)

Al mismo tono
Al mismo son
El coro cantó
su última canción

Sangre, pedían agritos
Sangre, gritaba el dolor
Sangre, lloraban las piedras
Sangre, sufría el amor
Sangre, derramó la lluvia
Sangre, pidió el horror
Sangre, gimió la sombra
Sangre, encontró el terror

Sangre, buscó a la muchacha
Sangre, encontró y obsequió
Sangre, contó en mil pedazos
Sangre, saboreó y pronunció

Sangre, encontró en el cofre
Sangre, bebió y sufrió
Sangre, lloraba la luna
Sangre, por el alma que perdió

Sangre, concedió el príncipe
Sangre, él revivió
Sangre, lloró por la muerte
Sangre, la llave cedió

Sangre, cantaron los actores
Sangre, pedía el partenón
Sangre aclamaba el teatro
Sangre, como el romado a dios

Por sangre, hizo tanto
Por sangre, corrió y subió
Por sangre, mató a la muerte
Por sangre, amo y murió
Por sangre, escribió esta noche
Por sangre, dedicó su canción
Por sangre, maldijo la letra
lo antes escrito y al escritor

Hiztoria: La hice en medio de una crisis existencial..algunas no tiene rima o no tienen sentido..pero no me importa..estaba re-depre cuando lo hice..espero que a alguien le guste...

Mi favorito: La última estrofa...

*Estoy escuchando: I try -de- Macy Gray*

Daniela y El Muchacho del espejo I parte

[Hola...siento no haberpodido escribir mas seguido..pero he estado un poco ocupada..aquí les dejo mi más reciente obra....Daniela y el Muchacho del espejo[primera parte]..estará divido en dos....
Pues, la verdad solo cree este cuento por un trabajo que me encargaron..hasta que luego me gustó..
Bueno ahi va...]

.:Daniela y el Muchacho del Espejo:.

El cumpleaños número 15 de Daniela, fue una mañana, fría y dulce como un copo de nieve. Estaba recostada en la cama de su nueva habitación. Se sentía aún un poco confusa. Había soñado que estaba en su antigua alcoba feliz y cómoda. De repente, estaba de regreso en su ulterior lar. “Lástima que solo fue un sueño” se decía para sobreponerse del repentino trasteo. Entonces, se acordó de algo “hoy cumplo 15 años” gritó altaneramente. Se le ocurrieron millones de ideas alocadas, pero se desvanecieron al recordarle lo que había pasado con sus padres…se estaban divorciando y su papá ya vivía en otra casa y en otra ciudad. Una frase se le vino a la mente “Todo estará bien”, se lo había dicho su mejor amiga, Celeste; aún no podía creer que se había alejado de todo aquello que amaba. Celeste, su padre, su escuela, todos sus seres queridos. Todavía recordaba los momentos felices pasados con ellos y con otros más, recordaba los momentos divertidos, los tristes, lo melancólicos, los absurdos, pero lo que más recordaba era que en todos esos momentos siempre estuvo acompaña por alguien y no estaba tan sola como actualmente estaba.
Ahora, mientras estaba echada en su cama, recordó nuevamente que no había nadie en su casa, estaba sola en su casa, pues su mamá estaba trabajando. Daniela trató de levantarse, “aún es muy temprano” se dijo asimismo, como excusándose, mientras suspiraba y se recostaba nuevamente.
Cuando, de repente, sonó el timbre de la puerta, ensordecedor y cómico como siempre. Daniela se levantó de un saltó del susto y corrió emocionada pensando que era un familiar o un amigo, dispuesto a dale un regalo o a saludarla simplemente, hasta con un saludo se conformaba. Estaba dispuesta a olvidar a su orgullo con tal de no sentirse así, tan sola.
Abrió la puerta y encontró un gran paquete, el cual se veía sospechosos, pero se lo habían dejado allí, así que era para ella. Lo llevó a su alcoba, donde decidió abrirlo y guardarlo allí. Era un espejo, ¿qué clase de regalo es este?, se dijo así misma. El espejo, en sí, tenía tocados medievales en el marco, el cual estaba rodeado por cuarzos de diferentes colores, era un poco inusual ver un espejo de esas características, era en sí algo más grande que Daniela, hasta un poco más podría decirse, tenía algo que lo hacía ver moderno, pero encerraba un aire mágico y soñador como los de antaño.
Aunque ella no sabía mucho de espejos, se dio cuenta de que éste podía ser llamado único, en fin, se miró en el espejo. Fue allí cuando Daniela se dio cuenta de lo mucho que había crecido. Ya no era la chiquilla que corría tras papá al verlo llegara casa. “Mañana tendrás 15 años”, le había dicho su mamá ayer, “ya eres todo una señorita”. A ella no le gustaba que se lo repitieran a cada momento, está bien ya era mayor, pero no quería aceptarlo, no quería afrentase al escepticismo del mundo actual.
Mientras seguía meditando sobre lo anterior, se dio cuenta que el espejo tenía algo inusual, no sabía si era ella o el reflejo que provocaba en el, pero tenía un brillo diferente y especial en sus ojos reflejados. Se miró profundamente a los ojos, ¿estaría soñando? Pudo ver en menos de un minuto todos sus sueños, sus metas, sus más profundos deseos, sus oscuros temores de lo más profundo de su alma. ¿Qué es este espejo?, pensó aterrada.
Se quedó con la duda, no quería saberlo, no quería saber que era ese espejo, solo quería poder entrar a ese mundo extraño a donde parecía poder llevar…
Estaba a punto de lograrlo, sabía que podía hacerlo, algo le decía que si era posible. No le importaban las leyes físicas u otras innombrables, las cuales decían que no se puede atravesar un espejo, o cualquier otro objeto físicamente existente; ella sabía que podía porque sabía que podía. Así que decidió aventurarse y tratar de sumergirse, para su sorpresa pudo pasar por el espejo…
Y rompiendo el momento mágico, sonó nuevamente el timbre de la puerta. Cerró los ojos. Los volvió a abrir, pero ya no estaba frente al espejo, estaba nuevamente en su cama. “Sorprendente”, se decía a si misma. Abrió la puerta, era Celeste, no lo podía creer.
-¿Queeé? ¡¡Hola!!, ¿Qué haces aquí? ¿Cuándo llegaste? ¡¿Qué sorpresa?!, ¿Por qué no me telefoneaste para decirme? – abatiendo a la recién llegada
-Sí, Hola-sonriéndole y pasando dentro, a la casa-pues, vine a saludarte, llegué ayer, por dos simples razones, aun no me decías el teléfono de tu casa y porque era una sorpresa
-¡Wow!, ¡que sorpresa!, aún no lo puedo creer… ¿cuánto te quedas?- mirándola con la esperanza que su respuesta la ayudara a sentirse mejor, por lo menos, el resto del día
-Pues-sonando triste, y tratando de aguantarse la risa- para mi sorpresa y la tuya-mostrando completa su sonrisa- a mi mamá la trasladaron a esta ciudad y vamos a vivir en la casa abandonada del final de esta calle!-saltando de la alegría y abrasando a Daniela de la emoción.
Ya era casi mediodía, Daniela ya le había terminado de enseñar toda su nueva casa y ahora estaban en su habitación donde era Celeste quien le contaba a Daniela sobre todo lo que le había pasado en el verano y en el colegio. Cuando ya esta había terminado de contarle todo, le preguntó a Daniela:
-¿Y qué estabas haciendo antes de que llegue?
-Nada-le dijo Daniela, tratando de recordar
-¿Segura? ¿Te noté media extraña?
-Ah síííí, fue por ese extraño espejo, por cierto gracias, está bonito y creo que ya descubrí para que es
-¿Qué espejo?-como sorprendida y confundida
-¿Qué? ¿No fuiste tú quien me regaló ese espejo?-se quedó pensando un momento-Yo pensé que habías sido tú, pues llegaste al instante en que apareció el espejo
-Pues yo no te envié un espejo, quizá mi regalo llegue mañana pues te lo envié cuando aún estaba en donde vivíamos, pero bueno, me podrías mostrar el espejo, ¿está aquí?-mientras buscaba con la mirada en todo el lugar
-Sí, está en ese closet-señalándoselo con el dedo-es un espejo hermosísimo y creo que tiene un poder extraño
Celeste se paró de la cama y se fue hacia el lugar señalado, abrió el closet, pero no estaba allí el tan mencionado espejo; primero pensó que se había equivocado de lugar y se lo comentó a Daniela, quien también se paró y fue hacia donde estaba ella.
-Te juro que estaba allí-gritó desesperada- no estoy loca, Celeste!
-Sí, está bien Daniela, yo te creo-le respondió-¿pero qué tiene de especial o qué?
Daniela le contó todo lo ocurrido en la mañana, y bien, aunque Celeste aun tenía sus dudas, las cuales quería guardar en secreto, no quería que su mejor amiga supiera que tenía dudas sobre su conducta psicológica.

Celeste aún dudaba, ya en su casa, se puso a investigar sobre espejos o algo así, ya que sabía que Daniela tenía problemas, pero nunca le había hecho alguna broma o le había mentido. Encontró sobre muchos espejos medievales que aún perduraban, la búsqueda fue intensa, algo le decía que su amiga estaba en peligro, así que decidió investigar profundamente. Fue descartando uno por uno hasta que por fin encontró uno que encajaba perfectamente con la descripción de Daniela. Pero algo estaba mal, si Daniela hacía lo que habían hechos muchas personas quedaría atrapada en otra dimensión de la cual, no podría salir sin alguna ayuda…

Habían pasado varias semanas, Celeste no había podido encontrarse con Daniela y eso le preocupaba, sabía lo que podía hacerle el espejo, tenía miedo por su amiga, por su mejor amiga, Daniela solo había asistido la primera semana de clases, después desapareció y pareció que la tierra se la hubiera tragado, su mamá que paraba todo el día trabajando no notaba su ausencia, pues en realidad Daniela nunca salía de su casa, siempre paraba en su habitación, encerrada y para ella eso no tenía nada de malo. Celeste a lo lejos, y a lo poco que veía a Daniela, se pudo dar cuenta que Daniela cada día estaba mas delgada.
Ya no podía más, tenía que saber acerca de su mejor amiga, se decidió a hacer una justa locura… Esperó a que la madre de Daniela saliera de casa para asomarse si estaba Daniela, lo estaba, no le quedaba de otra así que entró por la ventana, corrió hasta la alcoba de Daniela y justo cuando abrió la puerta, encontró a Daniela atravesando el espejo, se veía mal, ella no era la chica que le había abierto la puerta radiante el día de su cumpleaños, parecía mayor pero mas desgasta y cansada, parecía que en cualquier momento se iba a desmayar… Rápidamente Celeste alcanzó a Daniela, logró entrar justo a tiempo, con ella.
Al pasar el espejo, pudo darse cuenta de el cambio en el alrededor, allí, Daniela estaba como aquel día, todo era exactamente igual como el otro lado, solo que al revés. Celeste trató de alcanzarla, pero Daniela, se estaba dejando llevar y no la vio. Celeste decidió seguirla.
¿A dónde podrá ir?, pensaba, se estaba percatando que todo era casi exactamente igual al otro lado del espejo, solo que no habían personas, solo podían verse a las dos, pero Daniela no volteaba a ver a Celeste, ni ella la llamaba.
Daniela decidió parar y encontrarse con un muchacho, Celeste no lo podía creer “Daniela con un muchacho”, era algo casi imposible, ya que Daniela era de las chicas que creían que primero se deben cumplir todas las metas laborales y personales y luego buscar formar una familia.
Había algo raro en ese muchacho, ya lo había visto en otro lugar pero no se acordaba en donde, todo estaba bien hasta que él la señalo. Se había dado cuenta de su presencia en aquel lugar y Daniela también.
Pero no reaccionaron violentamente, en lugar de eso, los fueron hasta donde se encontraba ella y la saludaron muy cordialmente:
-Hola Celeste, que bueno que estés acá, mira él es Kaitt mi novio
-Y Kaitt, ella es Celeste, mi mejor amiga


*Estoy escuchando....ai otsuka - de-
renai shashin*

martes, 14 de agosto de 2007

Recomendación # 2

Hello..nuevamente...quisiera hacer un alto a "Los muchachos no escriben historias de amor", pues quisiera recomendar otro libro..este me lo prestó una amiga....
Es:::

Frin de Luis Maria Pescetti

PDT: Voy a tratar de leer "Lejos de Frin"..que es la continuacion..haber si tbm la recomiendo ^^


Bueno....Suerte!!!

domingo, 12 de agosto de 2007

Los Muchachos no escriben historias de amor II

(continuación)
Todo comenzó cuando Stuart Hall y otros dos de la clase contaban de las chicas con quienes salian...
En fin, aquella vez cuando toos estaban contando de las chicas con quienes habian salido, Stuart Hall se volvió hacia mi y dijo:
-Mateo no sale con nadie
-Pues fijate, que sí-replique
-¿Ah, sí?-dijo-¿cómo se llama?¿Berna?
Aquello le pareció increiblemente gracioso. No paraba de reir, luego codeó a su amigo y todos se rieron con él.
-Se llama Elizabeth-dijo
-Elizabeth que?-pregunté
Noté si no sabía muy bien si creerme o no.
-Elizabeth Collins-le dije-.Es una amiga de la familia

Enseguida me fui, no fuera a ser que se le ocurriera preguntarme mas cosas.
Desde entonces comencé a garabatear el nombre de Elizabeth en mis cuadernos de ejercicios, nada más para que pareciera mas cierto. Luego empecé a imagina cómo sería. Tiene el pelo largo, le llegaba hasta la mitad de la espalda y tiene un brillo 'super'. Es muy esbelta. A veces imagino que me está esperando al terminar las clases, cuando salgo de la escuela, y los otros chicos la ven cuando se encuentra conmigo. Me imagino exactamente la cara que pondría Stuart Hall.
A veces imagino que hemos salido y caminamos por la zona comercial cuando nos topamos con Stuart "Hola", lo saludo de la manera mas increiblemente natural.
Hay una gran diferencia entre Elizabeth y las otras niñas de mi clase. Todas ellas son realmente desagradables, sino, comunes y corrientes. Es una de las peores cosas de la escuela; tienes que convivir de gente durante una parte gigantesca de tu vida y nisiquiera puedes elegir que clase de gente son. Podran ser cualquiera, lo son... (...)

Decidí que había llegado la hora de irme a la cama. Subí y me senté a terminar mi carta:" Mi papá ha vuelto, tardísimo. Huele como a una fábrica de perfumes. Mí mamá está furiosa con él. En ste momento están peleando. Puedo oirlos decirse cosas como si fueran dos víboras.

No creo que tus padres hagan eso nunca.
Que suerte tienes
Es mejor que termine.Ojala nos veamos pronto

Besos
Mateo

sábado, 11 de agosto de 2007

Los Muchachos no escriben historias de amor I

Capitulo 4:
Decidí escribirle a Elizabeth. Subí a mi recámara, puse el seguro de la puerta, saque la caja donde guardo las cartas y elegí una hoja limpia de papel. Las tengo de muchos colores diferentes. Escogí una azul.

Escribí:

Lunes 11 de junio
Querida Elizabeth
Estoy sentado en mi habitación, escribiéndote, como siempre.
Raquel está en el baño.Problamente está sentada en la tina, leyendo, que es algo que le ha dado por hacer todo el tiempo. A bajo, mi mamá se bebe una botella de vino con su mejor amiga. Están celebrando su decisión de salir el fin de semana.
Linda se vuelve más escandalosa mientras más bebe, mamá, mas callada. No paran de hablar de cómo eran las cosas cuando eran estudiantes y vivían juntas. Antes de que conociera a mi papá. Mi papá aun no llega a casa. Me parece increible son casi las 10 y media. Nosé si mi mamá se ha dado cuenta de la hora que es.
Cuando era pequeño, mi papá acostumbraba tirarse en el piso a jugar al Lego conmigo. Me acuerdo como si fuera ayer. Solían ocurrirseles cosas francamente buenas para construir con el Lego. No unicamente casas.También haciamos robots y laberintos.Jugábamos a que los robots perseguían a los "droides" por entre los laberintos.
¿Las niñas también juegan al Lego? Me imagino que sí, porque Raquel también jugaba, aun cuando decía que ya era demasiado grande.


Tengo toda una caja llena con estas cartas a Elizabeth. Nunca las pongo en el correo, porque resulta que Elizabeth no existe. Yo la inventé.
Supongo de que les parecerá bien loco esto de escribir cartas a una chica imaginaria. A mí no me lo parece..

jueves, 9 de agosto de 2007

Recomendacion # 1:

Hello!
Solo para decir que recomiendo este libro:

LOS MUCHACHOS NO ESCRIBEN HISTORIAS DE AMOR de Brian
Keaney


---> Se ha convertido en uno de mis librozZ favoritozZ...lo recomiendo!!!

martes, 7 de agosto de 2007

Reír LLorando



.:Reír LLorando:.


Viendo a Garrik —actor de la Inglaterra—

el pueblo al aplaudirle le decía:

«Eres el mas gracioso de la tierra

y el más feliz...»


Y el cómico reía.

Víctimas del spleen, los altos lores,

en sus noches más negras y pesadas,

iban a ver al rey de los actores

y cambiaban su spleen en carcajadas.


Una vez, ante un médico famoso,

llegóse un hombre de mirar sombrío:

«Sufro —le dijo—, un mal tan espantoso

como esta palidez del rostro mío.


»Nada me causa encanto ni atractivo;

no me importan mi nombre ni mi suerte

en un eterno spleen muriendo vivo,

y es mi única ilusión, la de la muerte».


—Viajad y os distraeréis.

— ¡Tanto he viajado!

-Las lecturas buscad.

—¡Tanto he leído!

—Que os ame una mujer.

—¡Si soy amado!

—¡Un título adquirid!

—¡Noble he nacido!
—¿Pobre seréis quizá?

-Tengo riquezas

—¿De lisonjas gustáis?

—¡Tantas escucho!

—¿Que tenéis de familia?

—Mis tristezas

—¿Vais a los cementerios?

—Mucho... mucho...


—¿De vuestra vida actual, tenéis testigos?

—Sí, mas no dejo que me impongan yugos;

yo les llamo a los muertos mis amigos;

y les llamo a los vivos mis verdugos.



—Me deja —agrega el médico— perplejo

vuestro mal y no debo acobardaros;

Tomad hoy por receta este consejo:

sólo viendo a Garrik, podréis curaros.

—¿A Garrik

—Sí, a Garrik... La más remisa

y austera sociedad le busca ansiosa;

todo aquél que lo ve, muere de risa:

tiene una gracia artística asombrosa.



—¿Y a mí, me hará reír?

—¡Ah!, sí, os lo juro,

él sí y nadie más que él; mas... ¿qué os inquieta?

—Así —dijo el enfermo— no me curo;

¡Yo soy Garrik!... Cambiadme la receta.

¡Cuántos hay que, cansados de la vida,

enfermos de pesar, muertos de tedio,

hacen reír como el actor suicida,

sin encontrar para su mal remedio!



¡Ay! ¡Cuántas veces al reír se llora!

¡Nadie en lo alegre de la risa fíe,

porque en los seres que el dolor devora,

el alma gime cuando el rostro ríe!



Si se muere la fe, si huye la calma,

si sólo abrojos nuestra planta pisa,

lanza a la faz la tempestad del alma,

un relámpago triste: la sonrisa.



El carnaval del mundo engaña tanto,

que las vidas son breves mascaradas;

aquí aprendemos a reír con llanto

y también a llorar con carcajadas.

Juan de Dios Peza



HizZtoria:
En la oscuridad, los sentimientos son visibles??...Seremos invisibles?..No me acuerdo exactamente el lugar, pero leí una teoría donde se expone la existencia de seres a los q no los podemos ver pues son "invisibles"...y para ellos somos nosotros los invisibles.. [no se si me entiendan] ..Como si estuvieran en un mundo paralelo donde lo triste..es feliz..lo oscuro..claro...etc. [como que me gusta decir etcétera ¬¬] ..
No creo que sea preciso exponer si creo o no en la teoría [ya que esta esta en una minúscula parte aquí] ..pero no quiero decir que este imponiendo algo así [como algunAs creen pensar ¬¬] ...Solo trato de exponer algo que descubri..
[y finalmente...yo me pregunto..que tiene que ver esto con el poema?? u_U]


**Escuchando: Wonderfull
Days-El príncipe del tennis <---Anime =)**

lunes, 6 de agosto de 2007

Annabel Lee


En ingles:
It was many and many a year ago,
In a kingdom by the sea,
That a maiden there lived whom you may know
By the name of ANNABEL LEE;
And this maiden she lived with no other thought
Than to love and be loved by me.
I was a child and she was a child,
In this kingdom by the sea:
But we loved with a love that was more than love -
I and my ANNABEL LEE;
With a love that the winged seraphs of heaven
Coveted her and me.

And this was the reason that, long ago,
In this kingdom by the sea,
A wind blew out of a cloud, chilling
My beautiful ANNABEL LEE;
So that her high-born kinsman came
And bore her away from me,
To shut her up in a sepulchre
In this kingdom by the sea.


The angels,
not half so happy in heaven,
Went envying her and me -
Yes! - that was the reason (as all men know,
In this kingdom by the sea)
That the wind came out of the cloud by night,
Chilling and killing my ANNABEL LEE

But our love it was stronger by far than the love
Of those who were older than we -
Of many far wiser than we -
And neither the angels in heaven above,
Nor the demons down under the sea,
Can ever dissever my soul from the soul
Of the beautiful ANNABEL LEE

For the moon never beams,
without bringing me dreams
Of the beautiful ANNABEL LEE;
And the stars never rise,
but I feel the bright eyes
Of the beautiful ANNABEL LEE;
And so, all the night-tide,
I lie down by the side-Of my darling -
my darling -my life and my bride,
In the sepulchre there by the sea,
In her tomb by the sounding sea
Edgar Allan Poe

En castellano:
Hace ya muchos años,
en un reino junto al mar turquí,
vivía una doncella cuyo nombre
Os daré a conocer: Annabel Lee;
La cual gozaba con la idea
de ser amada y de vivir por mí.
Yo era un chiquillo y ella una chiquilla
En ese reino junto al mar turquí:
Mas con que amor inmenso nos queríamos
Yo y mi bella amiguita Annabel Lee;
Con un amor que hasta los serafines
Nos envidiaban, a ella como a mí.

Y esa fue la razón de que hace tiempo
en ese reino junto al mar turquí;
Soplara el viento de una nube helando
A mi bella adorada Annabel Lee;
Que sus padres de origen noble fueran
A buscarla, quitáranmela a mí,
Y fueron a enterrarla en un sepulcro,
Allà en el reino junto al mar turquí.

Ángeles, menos faustos en el cielo
Nos envidiaban, a ella como a mí,
Y esa fue la razón-todos lo saben
En ese reino junto al mar turquí-
Por la cual salió el viento de esa nube
Que heló y mató a mi bella Annabel Lee

Pero fue mas inmenso el amor nuestro,
Que el de aquellos, más graves de lo que yo fui
Que el de aquellos, más listos de lo que yo fui
Y ni los serafines en el cielo
Ni los demonios en el mar turquí
Podrán mi alma separar del alma
De mi bella adorada Annabel Lee

Que no brilla la luna sin traerme
Los sueños de la bella Annabel Lee
Y las estrellas no aparecen nunca
Sin la mirada fiel de Annabel Lee,
Y así, durante el flujo y reflujo,
Duermo junto a mi esposa Annabel Lee,
En el triste sepulcro abandonado,
En nuestra tumba, allá en el mar turquí.
Edgar Allan Poe



Historia:
El trágico y penoso fallecimiento por tuberculosis de Virginia Clemm, que contrajo matrimonio con Poe cuando la novia contaba apenas 14 años, termió por abatir el inestable ánimo del poeta, quien sólo le sobrevivó dos años. Poco tiempo antes de su muerte, y llamándole Annabel Lee, Poe dedicó estos sentidos versos a su difunta esposa. Con tal nombre. -"Nunca más"